sábado, 11 de mayo de 2013

CUALQUIER DIA, CUALQUIER LUGAR-EL TRAJE AZUL


ACTO III-LA NOCHE-EL TRAJE AZUL

Si me hubiera visto mi madre,
hubiera dicho, estoy seguro, aquello de:
-“¡Que bien estáis los hombres con traje azul!”

La verdad es que no sabía que lo tenía,
(el de la boda, supongo)

Y sí, es verdad, me sentaba bien.
Y qué mejor ocasión, pensé, para lucirlo.

Vinieron muchos de mis amigos, y otros que,
no me acuerdo cuando, dejaron de serlo,
pero todos con los estragos
de la vida en sus caras.

Sin embargo, que curioso,
para ellos, yo  estaba estupendo.

De pronto alguien dijo:
-“Venga vamos, que el coche ya está abajo”.
Oí un golpe, se hizo de noche, sentí
un traqueteo, un intenso calor,
y después…
ya no recuerdo  nada.

Y aquí estoy, los 21 gramos de mi nuevo yo,
desde la repisa de la chimenea,
haciendo lo que siempre me ha gustado,
contemplar la vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario